Hace ya un par de horas que ha despertado Santa fe de la Veracruz de la hora de la siesta, es una tarde brillante de junio de 1810. La modesta ciudad retoma su ritmo en la plaza del centro, en las escasas calles…Los portales de las casas blanqueadas, dan paso a los habitantes que reaparecen como actores cuyos guiones prefijaran el lugar en la escena. El aire lozano entra libremente en las viviendas de puertas abiertas y en las iglesias, únicas construcciones que se elevan sobre los techos bajos. Los pájaros- abandonados sus nidos en los campanarios y arboledas -dan vida a las cuadrículas tranquilas y arenadas.
Las señoras Doña Prudencia Acuña de Garcilaso y la hija, Doña Natalina, han salido al primer patio de su residencia- una de las más acomodadas de la vecindad- y se han instalado bajo el parral que conserva cierto follaje. Es un otoño que tarda en llegar.
Viene olor de naranjos, rebosantes de frutos, al que se suma la esencia de mirra y laurel, que han quemado en la habitación del niño Felipe, que ayer, luego de un baño inapropiado para la estación -en el agua fría del río- ha comenzado a los estornudos…
Una muchacha parda trajina en el aljibe llenando de agua grandes tinajas.
Los chicos, no muy alejados juegan con una pelota. La niña Pilar abraza la muñeca que ha recibido como regalo de cumpleaños, mercadería muy fina procedente de Buenos Aires
En el zaguán- fumando sus cigarros- descansan Rodrigo Garcilaso y su yerno Alonso Fuentes, el primero ha regresado de un viaje, y se encuentra bastante cansado. La buena de Zaína- morena útil para cualquier quehacer doméstico- les ceba unos dulces mates.
Ambos son ricos comerciantes y dialogan sobre el costo de mercaderías, los viajes, las ganancias. Hablan de los objetos de compra- venta: sedas, cordones, tafetanes, brocatos, paños, medias de algodón, colchas, lienzos , ponchos de merino, pellones de carnero y oveja, sarazas, cintas de terciopelo, barajas, tinteros de marfil, botas, navajas, medias de seda inglesas para hombres y mujeres, espejos de tocador …Ambos se quejan un poco de algunas deudas pendientes. Ellos no hacen sólo negocios e intercambio de mercaderías con Buenos Aires sino con todo el virreinato, llegando sus carretas hasta Tucumán, Salta y Juyuy, y más allá, hasta La Paz, Chuquisaca, Cotagaita y Potosí, asimismo comercian con el Paraguay y con España.
Aunque últimamente lo que más tiene ocupado a Don Rodrigo, es la cría de vacas y mulas, en una estancia que su padre compró allá por mil setecientos ochenta y tantos. Aprovechando las mulas es que realiza un tráfico importante con las provincias del Norte y el Alto Perú.
Entre un mate y otro Don Rodrigo le cuenta a Don Alonso de los oficios del compadre Agustín que está en el rubro de las maderas, la mayoría de ellas proveniente de bosques e islas santafesinos, parece que recientemente obtiene sus buenos beneficios con el quebracho, extraído del llamado Chaco santafesino y con madera procedente de Misiones, que viene en jangadas por el Paraná.
Don Alonso comenta a su vez que en una oportunidad participó de una importante compra de cedro, biraró y lapacho, cuyas maderas son muy buscadas para muebles y construcción.
Pero como en las tardes inmediatas anteriores de ese inusitado mes de junio, el tramo anterior de la conversación es casi introductorio, porque se vuelve una vez más a lo medular, a lo que domina todas las escenas domésticas santafesinas: es que el día cinco de junio, casi a horas vespertinas, una noticia llegada de Buenos Aires, hizo que las campanas repicaran más fuerte que nunca y que salvas de fusil rompieran la serenidad habitual… ¡El 25 de Mayo se había producido una revolución! El virrey Cisneros había sido depuesto de su cargo. La buena nueva fue en la oportunidad acompañada con grandes manifestaciones de alborozo en todo el caserío santafesino y el emisario- Don José Espínola- ovacionado como muestra de adhesión.
Pero con el mensaje también se había pedido la designación de un diputado que representaría al poblado en la Junta de Gobierno…y es así que comienza el gran motivo de cotilleo en los últimos días. La cuestión suscita discusiones, descontentos, argumentaciones de la más variada envergadura: ¿Tienen los jóvenes el mismo derecho a intervenir en estos debates ¿No hay que privilegiar a los ciudadanos notables?
Doña Prudencia y Doña Natalina entre puntada y puntada también hablan del tema, ellas están enteradísimas porque la niña de los mandados las tiene al corriente de todo lo que circula en los comercios.
Saben que sus maridos- Rodrigo y Alonso- habían sido convocados como vecinos importantes para proponer ternas de diputados que luego irían a sorteo, pero también saben que una lista no oficial, convocó a los jóvenes de la ciudad…
Este detalle es lo que al momento tiene enojados a sus cónyuges, porque parece ser, que uno de estos jóvenes- José Elías Galisteo- llegó temprano a la reunión y ocupó el lugar del honorable juez y diputado de comercio Don Juan Francisco Tarragona.
-¡Con lo precipitados que son los jóvenes para sus votaciones!- opinan al unísono los varones mayores de esta familia. Sólo sería aceptable su votación si se hace, con posterioridad a la de los mayores más encumbrados…
Pero las señoras sienten simpatía por la causa juvenil, así que hoy se han puesto muy contentas, porque según dejaron traslucir a la hora del almuerzo sus señores esposos, un tal Mariano Moreno- protagonista de la causa de Mayo- ha enviado a toda velocidad una misiva que versaba :
"para la elección del Diputado deben citarse todos los vecinos existentes en la ciudad, sin distinción de casados o solteros y que la asistencia debe verificarse sin etiqueta ni orden de asientos para evitar toda competencia y dilación, encargándose al cabildo la armonía en la elección y el interés con que debe huirse a todo espíritu de partido en asunto que tanto interesa a la pública felicidad”Don Rodrigo y Don Alonso ya redondean la conversación y la mateada, es la hora de entrar a la casa, también las señoras comienzan a sentir demasiado fresco en el patio. Llaman a los niños y a la sirvienta que con cariño los ayudará a higienizarse antes de que llegue la hora de la cena. Los mayores se reúnen en la estancia que hace las veces de salón y de comedor.Una robusta mulata ha encendido las velas, porque la hora tardía ya ha oscurecido los rincones.Las señoras se marchan para la rutina de supervisión de la comida sencilla con que cierra el día…
Como remate del tema revolucionario, Don Alonso, entre risas, le cuenta a su suegro la cambiante actitud del gobernador -don Prudencio María Castañaduy- que ha enviado un mensaje a la Primera Junta, para manifestar su adhesión y la de toda la población…pero hasta hace poco el mismo hombre, se manifestaba en contra de los “infernales papeles subversivos”, folletos de la propaganda prerrevolucionaria.
Cae la noche serena, el silencio es apenas interrumpido por grillos y pájaros nocturnos, el olor a cocido de carne y vegetales invade agradablemente la casa,llega con las voces apagadas de las criadas que se atarean en la cocina.
Es una ciudad que hasta el momento vive con cierto extrañamiento, los hechos que tanto han de incidir en la historia de la patria…
No muy lejos se abren los caminos hacia la siempre lejana Buenos Aires
isa bertero
Los personajes de la familia son imaginarios, no así los nombres de autoridades, del portador de la noticia revolucionaria y de los protagonistas del conflicto para elección de diputado.
Las fuentes para la descripción de la ciudad colonial pertenecen a: La Vivienda En Hispanoamérica. El caso de Santa Fe, en
Centro de Estudios HispanoamericanosLas fuentes para la explicación de las actividades comerciales pertenecen a:
Información Cultural de la provincia de Santa Fe - República ArgentinaLa fuente para la explicación de la contienda entre jóvenes y vecinos representativos así como a la actitud del gobernador corresponde a
Alma de Barrio, tu lugar a la vuelta de la esquina...&s=noticiadetallepágina que cita a Leoncio Gianello en su libro “Historia de Santa Fe”
Imagen de la campana que perteneciera al Cabildo de Santa Fe de: En el trazado oficial de las rutas de los Jesuitas se olvidaron de Santa Fe. Diario El Litoral - Santa Fe - Argentina
Imagen y descripción Casa de los Aldao http://www.monumentosysitios.gov.ar/bienes/files/SantaFe.pdf
Plano en: URBANISMO HISPANOAMERICANO. EL PLANO DE SANTA FE DE 1811 de Rubén Osvaldo Chiappero
