'cookieChoices = {};' bajolaslilas 'cookieChoices = {};'

BAJO LAS LILAS ES EL PRIMER LIBRO QUE RECUERDO HABER LEÍDO- DE MUY NIÑA- EDITADO SIN ILUSTRACIONES, o muy escasas- portada y aisladas en capítulos- (quiero significar: primer paso hacia una literatura sin apoyo visual, que es lo que requieren generalmente las publicaciones infantiles) Lo cito porque creo que no sólo lo cercano (en tiempo y espacio) es grato a un lector. Niños y adultos gozamos de viajar con el imaginario, escuchar otras voces, pensar otros lugares y realidades.



Lo que aparezca en mi blog, sin referencia externa, puede ser utilizado citando la fuente.

Contacto:isamirna@yahoo.com.ar


Muchas gracias a los que envían comentarios a mi correo!

jueves, 22 de julio de 2010

FELIZ DÍA DEL AMIGO TODOS LOS DÍAS


La amistad
Tecayehuatzin
Cantares mexicanos

Cual pluma de quetzal, fragante flor,
la amistad se estremece:
como plumas de garza, en galas se entreteje.
Un ave que rumora cual cascabel es nuestro canto:
¡que hermoso lo entonáis!
Aquí, entre flores que nos forman valla,
entre ramas floridas los estáis cantando.
(Poesía náhuatl)

REFLEXIÓN
Yo sé compañero, compañera, que cada uno tiene esa vida tan suya, tan única...
Pero me gusta pensar que nuestros espejitos: brillantes y enteros algunos días, resquebrajados a veces, desparramados o juntos, destellan un instante, un tramo, en una charla, en un abrazo, y así nos reflejamos, nos acercamos, y nos contamos los unos a los otros. Aun siendo distintos, o estando lejos, ensayamos la forma ajena. Alteralidad versus mismidad. No esperar todo, ni siempre, ni continuo, repasarnos mutuamente y saber que estamos.

Isa bertero



Reflections of Mirrored imagen de: http://gcgal.fiu.edu/ArtonLoan/Artists/Koivu.htm

viernes, 9 de julio de 2010

OMISIÓN







Una cosa buena sería
Recuperar la lágrima
Pero qué trabajo
Dejar que vuelvan cosas olvidadas
Mejor dicho:
Ataditas, encerradas, embotelladas
Sitiadas, enjauladas, enrejadas,
Apagadas, sosegadas…
Qué trabajo sentir
Mirar al niño
en su rincón de pared y arena
al amigo que se fue
Pensar otra vez la risa estridente, ignorante
El flequillo, los zapatos feos
Imaginar el árbol y el alambrado con herrumbe
El tapialito y las noches insomnes
Con estrellas de otros
Desbloquear el alma
Y otra vez andar con el frío
Y olfatear el abrigo
Con la naftalina de quizá qué ropero
Recuperar el instante
Con la noticia de la muerte
Y decisiones
Y palabras
Y reyertas
Y amores
Y ausencias
Demasiado.
Es demasiado trabajo


isa bertero

jueves, 1 de julio de 2010

APORTES PARA PENSAR LA ESCUELA

Existen cuestiones referidas a problemáticas en la educación de las que poco se habla, o forman parte de lo que no queda bien hacer visible frente a la comunidad, que quiere buenamente creer que la escuela brinda igualdad de oportunidades para todos. Sin entrar en otros parámetros, que han sido estudiados por grandes pensadores de nuestro tiempo (más abajo copio entrevistas a Bourdieu)el que voy a señalar atañe a la formación del docente, a la necesidad de perfeccionamiento-muchas veces circunscripta a lo estrictamente personal,a la voluntad individual-, a las diferencias entre el acceso a desarrollos en las grandes urbes versus comunidades pequeñas. Estas afirmaciones parecen oponerse a los discursos altisonantes de gobiernos y gremios. En este último caso- al menos en la provincia de Santa Fe y en los últimos tiempos- la negociación versó en torno al salario y a la permanencia por datos de antigüedad más que en torno a cuestiones de avance profesional, de acreditación por antecedentes académicos, que impliquen estudio y evaluación. Si al docente no se le facilitan caminos en este último sentido, si no se le plantean exigencias -que el sistema sustente en lo material- es ingenuo creer que la buena energía o el sentido común o la sola búsqueda particular van a producir cambios, redefinición de las estrategias de enseñanza, reconocimiento de los nuevos entornos educativos y de recursos transformadores.
Lo que está ausente -estimo- es un sostén teórico, un estudio sistemático que proporcione fundamentaciones, que vaya mucho más allá de la inmediatez para resolver una situación didáctica determinada. Lo que me parece necesario es proporcionar orientaciones, bibliografía, herramientas que permitan al educador enriquecer el modo de pensar, sentir y actuar sobre la realidad. Mayor riqueza interior, mayor desarrollo intelectual, tendrían que necesariamente devenir en mayor y mejor entrega en ese acto esencial de interacción docente-alumno.
Lo antedicho me preocupa, sobre todo porque las carencias señaladas han ido paulatinamente en desmedro de la escuela pública. Son muchas las familias, que más o menos sensibilizadas al respecto, han comenzado a creer que la escuela privada ofrece mejores alternativas. Puede que ésta exija por un lado y por otro cuente con mayores posibilidades de elección del personal o con mayores recursos materiales, pero en la práctica es sencillo observar que las diferencias no se transforman en resultados muy diferentes, sobre todo si apuntamos a la comprensión, al poder pensar y reflexionar sobre los escenarios sociales, desde lo que cada institución propone como trayecto educativo.
La reflexión anterior viene a cuento, porque nos han enseñado que en otros tiempos la escuela fue en Argentina un puente para acceder a universos vedados para muchos de nuestros mayores. Y hoy esto no es tan perceptible, salvo que la procedencia, el entorno cercano sea estimulante y creativo o casos de minorías- esto también incluye algunas propuestas institucionales- que no desmienten la generalidad. Hay datos que se leen en establecimientos educativos o en conversaciones con docentes, dolorosos, pero muy ciertos. He sido testigo de numerosas situaciones en que la escuela reproduce mecanismos sociales. Por ejemplo cuando de alumnos procedentes de otros lugares se observan antecedentes y en función de ello se determina el perfil , o cuando las fichas que teóricamente deberían enriquecer el conocimiento respecto del alumno, para potenciar inclinaciones y reducir flaquezas, se constituyen en documentos de catalogación en una u otra “casta” educativa-económico-social. He escuchado referencias que ilustran que de tal o cual familia o como portación de tal o cual apellido, los rasgos son definitivamente de un modo determinado, insoslayable.
El lenguaje, y esto seguro resulta familiar a muchos de mis compañeros de trabajo, nunca es vacío de significado. Las palabras con que nos referimos a los chicos, a los modos de enseñar y esperar que el otro aprenda, los comentarios sobre contenidos emanados de medios masivos , las apreciaciones acerca de padres, de modos de vida y trabajo, las determinaciones sobre las posibilidades y expectativas de logros, los discursos que encasillan, vehiculizan ideología, y a veces ésta es lamentable, si tomamos conciencia de que el hecho educativo es un diálogo permanente, un hecho comunicativo que dejará señales para toda la vida.
Se sabe que la escuela pública, ofrece pocas horas comparada con las que el alumno pasa en otros contextos, la casa, la tele, los amigos, por eso justamente se deberían poder fortalecer mecanismos de lectura de la existencia, de acceso a códigos que en otros ámbitos les están negados.
Asimismo es cierto, que las prácticas educativas en sus espacios propios son los lugares que toda teoría de la educación debe "pisar" "experimentar" "confrontar", también de la práctica se aprende y se conoce, sobre todo si hay respaldo emocional, intelectual, aptitud social. No basta con "dar o recibir cursos" de saberes librescos, para concretar perfeccionamiento, para generar cambios de actitudes y de ambientes.
Renglón aparte sería referirse a la irrupción real y de valor de las nuevas tecnologías, casi ausentes en las dinámicas de trabajo cotidiano.
No sé cuál es la solución, y tampoco me siento al margen de los hechos, como crítico que la mira desde afuera pidiendo “peras al olmo”, pero tengo algunos lectores involucrados en las dinámicas cotidianas de las escuelas. Algunos están desanimados, apesadumbrados, otros- o los mismos- en una búsqueda personal persistente. Yo intento aportar una micropartícula de arena, acercar alguna idea, algún material de lectura.
Los videos que adjunto espero acrecienten el pensar, promuevan la reflexión, alienten en la búsqueda.







lunes, 21 de junio de 2010

ADOLESCERE





Maia tenía un código para los números de boleto del colectivo. Cero: te quiere, uno: noticia; dos, separación; tres: encuentro; cuatro: noviazgo; cinco: disgusto; seis: carta; 7: piensa en ti; ocho: celos; nueve: lo verás, y con él hablarás…
Por supuesto que el dos y el cinco eran lo más temido en el sistema cabalístico, inútiles para soñar.
Cuando los boletos tenían números adversos los tiraba como si guardarlos fuera la materialización de las fuerzas negativas.
Con los otros construía barquitos, con un plegado que alguien, alguna vez, le había enseñado.
En la evasión de mirar el número del boleto y apretujarse entre otros pasajeros construyendo barquitos, ocupaba el tiempo vacío del viaje mientras escuchaba algunas conversaciones ocasionales, recibía o enviaba mensajes de texto, o miraba pasar el paisaje urbano a través de los vidrios, siempre un poco sucios o empañados y pensaba en el amor.
Sus amigas y amigos se enamoraban, o se ponían de novios, incluso ella bromeaba sobre el tema en el chat, pero en lo profundo lo miraba más seriamente, casi se sentía un poco antigua… Tal vez porque desde muy chiquita había leído todas las historias de amor, de príncipes, de brujas, historias de mundos paralelos, de tiempos lejanos, de escenarios maravillosos…
Tenía cuadernos y carpetas que adornaba con imágenes bellas con las que hacía collages, a los que agregaba palabras, que le sonaban bien, evocativas, creadoras.
Sabía que en realidad quería un amor, con todas las cualidades de lo imaginado, pero bien plantado en la tierra, para ir de la mano, reírse, llorar, compartir. Un amor para armar horas, para andar paralelo.
Un día, cuando iba hasta el centro, entretenida con la lectura de un libro, siguió viaje y para cuando se dio cuenta estaba lejos, cerca de la costanera. Desde el verano que no iba al río, así que fue a mirar. Atrás pasaba el puente por el que circulaban vehículos y también paseantes. Crecía una vegetación agreste: juncos y duraznillo blanco, repollitos y helechos del agua, pajonales. Maia llevaba sus barquitos de boletos en la mochila… ¡Un bolsillo lleno de barquitos!...Cuando pasaban flotando los camalotales, los tiraba uno a uno…encuentro, noviazgo, noticia…
Cuando llegó al último, lo echó sobre un camalote que lucía una flor bonita y dijo con fuerza:
- ¡Repórtate amor!
Y regresó a su casa, porque se hacía tarde.
Pasaron los días. Llegó un sábado con sol brillante y Maia fue a encontrarse con sus amigos, para tomar mates y charlar, en el paseo de la costa. En un impulso, volvió al lugar desde donde había enviado a pasear sus sueños.
Por supuesto… ¡Ni rastros!
Al rato se paró en la veredita del puente, a mirar el paisaje, los pescadores, las embarcaciones de paseo… para sus adentros sonaba la canción de Andrés Calamaro:

En el balcón
Donde pega más el sol
Mirando pasar
A los pájaros volar
No quiero saber
De dónde vienen volando
No quiero saber
Adónde van...
Cien pájaros volando!
….
Hay palabras escritas con viento
No hace falta decir!
Adónde van
Cien pájaros volando!
En una mano hay palabras escritas con fuego
Y en el corazón hay
Cien pájaros menos
No hace falta decir
De donde vienen volando
….
No hace falta decir de dónde vienen
No hace falta decir adónde van
No hace falta decir que quiero uno en la mano
No hace falta decir adónde van

...
Bruno estaba tan absorto en atarse el cordón de la zapatilla, mientras se desplazaba a los saltitos con un solo pie, que no vio a Maia y mucho menos a la mochila abandonada a su lado, así que tropezó y se cayó en medio de un desparramo de libros y papeles. Ella, para salvarlo del apuro se puso a ayudarlo a juntar todo. Un papelito diminuto comenzó a alejarse, empujado por la brisa, Maia lo alcanzó. Era sólo un boleto de colectivo que seguro había estado entre las páginas desparramadas; por costumbre, miró el número… ¡Tres!
Cuando entre risas las manos se juntaron, un poco torpes-Bruno para recibir lo suyo-, Maia, no pudo evitarlo, así que le dijo muy suavecito:
-¿Repórtate amor?
En algún lugar, barquitos de papel húmedo, viajaban con el río… ¿Quién sabrá hasta dónde?

viernes, 11 de junio de 2010

DEL CUADERNO DE LA SEÑO...Una escena en la época de Belgrano



Gif animados para el blog o página web

Éste es un relato que transcurre en la época de don Manuel Belgrano, y nos permite asomarnos un poquito a la vida de un hombre que hoy recordamos como prócer de la patria, pero que como todo prócer, antes de pasar a los libros de historia fue una persona, igual que muchas, que estudiaba, pensaba, se enfermaba, hacía cosas importantes y otras igual a las que hacemos nosotros, como comer, dormir, etc.…Bueno, paso a contarles...















En la casa de los Martínez Argüelles, se encuentran las niñas reunidas en el salón, Candela, Paz y Felicia. La Sra. Ema, una institutriz, les enseña a bordar en hermoso punto cruz, los manteles destinados al altar de la virgen.
En esa época las niñas de las familias decentes del Buenos Aires colonial pasaban la mayor parte de su tiempo en sus grandes casas, con sus costuras, bordados y zurcidos, también iban a las misas. Sus padres las instruían en las primeras letras, pero sólo los muchachos iban a la escuela…
En medio de la conversación, que se lleva a cabo entre risitas contenidas y en tonos medidos comenta Ema:- Este fin de semana, si el tiempo es bueno ha dicho vuestra madre que nos trasladaremos a la quinta, y agrega con tristeza…lástima que los muchachos estén castigados.
-¿Qué ha pasado?- pregunta Felicia
Paz, la más pequeña, que siempre está escuchando tras las puertas las conversaciones de los grandes contesta rapidito:
- Es que el maestro tuvo que administrarles la palmeta porque no habían estudiado bien la lección…
- Pobres niños – dice Ema - vuestro padre agregó al castigo la prohibición de ir con nosotros el fin de semana…
-¡Qué suerte que nosotros no tenemos que ir a la escuela! Porque me parece que es un lugar espantoso…-.reflexiona Paz
Candela que ya va cumplir los quince y está aprendiendo danzas para ser presentada en sociedad, interviene como si la hubiera picado un mosquito…
- No seas tonta, sería muy bueno ir a la escuela, porque allí podríamos aprender esas cosas que después no entendemos cuando hablan los políticos y los gobernantes…me enteré en el salón de baile que Manuel Belgrano, habla a favor de nosotras, las mujeres. Él dice que si estuviéramos más preparadas, que si recibiéramos educación, podríamos formar mejor a nuestros hijos, prepararlos para que no sean ignorantes…
En ese momento hace su entrada la madre de las señoritas - Carlota- una señora muy rica, cuyo esposo tiene campos, tierras y ganado…ella está un poco gordita y aburrida porque pasa su tiempo comiendo dulces en las reuniones de salón y parloteando chismes coloniales
- Creí escuchar que nombraban a ese Belgrano, menos mal que ustedes no son los muchachos para dialogar de este tema con vuestro padre porque la sola mención de ese nombre lo haría enojar muchísimo, dice que sus ideas sobre la educación y la economía hacen bailar en las tumbas a nuestros gloriosos abuelos (que Dios los guarde)…
- Ah, no señora- habla Felicia, la mayor de las señoritas- yo he escuchado que con sus ideas habría menos pobres, porque lo que él quiere es un justo reparto de tierras para que haya más agricultura y menos grandes territorios en manos de unos pocos
- Mi niña, mi niña, no hables de cosas que no sabes, nosotros mantenemos desde hace años tierras que siempre han sido de la familia, no vaya a ser que quieran repartirla entre unos pobres gatos que nunca han tenido más que penas
- Por eso madre- dice Candela –alguien que se preocupe por esas personas debe ser un gran hombre, al menos el cura párroco dice que hay que pensar en los pobres. A mí sus ideas me parecen magníficas, me han contado que también habla de que las escuelas sean para todos y que en ellas enseñen a trabajar con hilazas de lana y algodón trayendo de Europa los tornos necesarios…

La señora Carlota lo que sabe es que en las tierras familiares se cría mucho ganado, y que esto es fuente de riqueza para su familia, ha oído decir a su marido que entre las ideas de Belgrano está el desarrollar la industria, porque la sola cría de ganado enriquece a pocos, no da trabajo a mucha gente y favorece a los extranjeros que se llevan los productos que después gracias a la industria convierten en mercancías de mucho costo…
Pero a ella como a tantas ricas señoras de la época, mucho no le interesan esas cosas, así que exclama:
- Bueno, bueno, basta de cháchara señoritas que por suerte ese hombre es también militar y ahora el gobierno lo ha mandado nuevamente a la guerra…es que ha tenido algunas acciones destacadas en esta revolución que parece no acabar nunca- y ahora me voy. Ema, aleccione Ud. a las señoritas para que hagan bien ese punto que el dibujo de Paz, no está saliendo muy bien…
Cuando se retira la Sra. moviendo su miriñaque, aparece Dorotea, la negrita que sirve el chocolate, ella ha podido escuchar las últimas palabras así que no puede dejar de “meter la cuchara”. Como es la que acompaña al mercado a la encargada de las compras siempre está muy informada de lo que el pueblo sabe, así que exclama:
-Ay, mis Ema ¿Puedo contar a las niñas las últimas noticias?
- Mientras sea algo que no te avergüence parlanchina…
Y allí la Doro – como le dicen las niñas- les cuenta que ha llegado el negro Pedro un soldado que fue dado de baja por Belgrano porque en una mala caída se quebró una pierna, pero que pudo estar en un hecho maravilloso ocurrido a orillas del río Paraná, donde se hallaban para detener el avance del enemigo…
Por supuesto que las niñas muertas de curiosidad quieren saber los detalles, así que la negrita les cuenta que Pedro entre lágrimas había dicho:- ¡ya tenemos bandera!
La señorita Ema pregunta también los detalles así que Doro narró cómo Belgrano había enarbolado por primera vez, frente a un grupo de soldados la bandera celeste y blanca de su creación.
Las niñas no podían creer lo que escuchaban, hasta entonces ninguna bandera había ondeado en medio de las batallas de la revolución para distinguir a los rioplatenses, no sabían si creer o no…
-Bien es posible –dice Felicia- porque ese hombre parece de mucho coraje, quizás estemos por vivir un hecho muy importante…
Y la historia narra que así fue, pues el 27 de febrero de I8I2, ante sus hombres formados en cuadro, Belgrano presentó por primera vez nuestra bandera diciendo:
"Juremos vencer a los enemigos interiores y exteriores, y la América del Sur será el templo de la Independencia y de la Libertad".
Y gracias a este relato, nosotros que somos herederos de la historia y que tenemos escuelas para todos, en las que flamea la bandera de la patria sabemos un poquito más de la historia de Belgrano, por ejemplo su preocupación por la educación y la economía…
Otro día les contaré chismecitos más sabrosos, por ejemplo de los amores de Manuel, pero eso… ¡Será otro día!

Isabel Bertero

sábado, 5 de junio de 2010

Solsticio de Invierno















Solstitium
Sol sistere
Sol quieto
En la ciudad los pájaros buscan cobijo
En las veredas desguarnecidas del amanecer
se pisan las hojas húmedas y amarillentas
que nadie recogió
Huelen a leña pobre
las ropas de los desamparados
Los otros
tienen hogares cálidos

Sin embargo
Sólo hay una tierra y un sol
Solsticio:
Es la noche de sombras
Inti Raymi
Esperan los incas la aparición de su dios
Pueblo, generales y príncipes
Fieras máscaras de la mitología
elevan la mirada
hasta que aparece
el que va a nutrir
la tierra y los frutos
Invocan las almas
el favor del calor sagrado
detenido un instante
en el universo insondable
Solsticio:
Machac Mara
Los aymaras
frente a Tiwanaku
esperan a Inti
que hará fecunda a Pachamama
Solsticio:
We Tripantu
Los mapuches
contemplan a los Siete Cabritos
más cerca de la Tierra
La naturaleza y el cosmos
renuevan sus fuerzas
Nacerán distintamente
la vida y el tiempo
La larga oscuridad
acuna ministerio de luz



Puede que los cambios de los ciclos vitales inviten a pensar desde múltiples miradas: la diversidad cultural, el ambiente humano, las diferencias sociales. Sería dable considerarlos como tópicos generativos para reflexionar sobre las creencias y costumbres de pueblos originarios (no sólo de Suramérica); el arte y la religión permiten el acercamiento a realidades alejadas en el tiempo y en el espacio, que resultan difíciles de reconocer desde el yo, desde otra cosmovisión, desde la cultura del avasallamiento y los mecanismos del poder.
Pensaba, que mientras para muchos la estación invernal representa abrigo, un recorrer apurado de las calles en busca del refugio del hogar o del trabajo, para otros representa hambre, frío, necesidad. Asimismo hay quienes la identifican con deportes invernales costosos, con cambios de ropa, moda, eventos culturales en ambientes cerrados.
Las ceremonias de los pueblos originarios para recibir el invierno- lejos de la tendencia actual a la banalización y a la explotación turística-, representan una visión más humanitaria, más noble, referida al respeto por el planeta que habitamos, a los ciclos naturales, al compartir, celebrar y agradecer, así como un conocimiento profundo de los fenómenos del mundo físico y un mayor poder de percibir, recibir, beneficiarse.

isa bertero

imagen de:
http://www.iwg.com.ar/janinemeyer/gallery/andes2/13.jpg

Data: Solsticio de Invierno 2010 se produce el 21 de Junio a las 08h 28m. (94 días de invierno)segúnhttp://www.misionesonline.net/noticias/04/01/2010/toda-la-efemerides-astronomica-para-el-2010

Vínculos Interesantes:

http://villalaangostura.wordpress.com/2009/06/21/21-junio-solsticio-invierno/
http://www.interpatagonia.com/paseos/ano_nuevo_mapuche10/
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-127126-2009-06-24.html


RECOMENDADOS PARA DOCENTES
http://coleccion.educ.ar/coleccion/CD6/contenidos/aula/EGB1/act_invierno1a.html

http://coleccion.educ.ar/coleccion/CD9/contenidos/recursos/libros_quebrada/lib4/index.html

domingo, 30 de mayo de 2010

De las ciudades de los sueños. Despertar




















En las ciudades de los sueños, hay múltiples caminos; pero no se puede elegir. Tienen que ver con el día, con las imágenes prestadas, con sensaciones robadas a letras ajenas, con el amor, la amistad, el encuentro, la alegría y la tristeza, la paz, el desconcierto, el miedo, la riqueza, la pobreza…

¿Son un mundo paralelo que transcurre?

En sueños recurrentes
Pierdo cosas
Documentos, papeles, portafolios
Objetos que nunca tuve
Algo queda para el aire fácil de la mañana
Desazón?
Entonces comienzo a caminar
A mirar
A reajustar el lenguaje conveniente
También el rostro perdido
Un día más
Para juntar minutos
Como torrecitas de arena
Que brillan cuando hay sol
A veces
Los sueños tienen lloviznas persistentes
Sin embargo
Mientras quito manchitas de los espejos
Y recupero superficies
Encuentro que todavía
Hay guaridas


isabel bertero

Imagen de:Colección | Arte Spain">